En Viña 2000

Emmanuel: Espero que el festival sea padrísimo

El artista mexicano, que se presenta hoy en la Quinta Vergara, adelanta que su show se basará en las canciones del recuerdo

Resulta difícil observar a Emmanuel y asumir que ya bordea los cincuenta años. Pareciera que el título elegido para su último disco, "Sentirme vivo", explica a cabalidad su actual imagen. Sonriente y amable con la prensa, el artista mexicano asegura que pasa por uno de sus mejores momentos personales y artísticos y que todavía, se da una vuelta por las ganaderías de su país para practicar el ancestral arte de la tauromaquia. En cuanto a su reciente larga duración, el azteca lo define como contemporáneo, fresco y ajeno a formulas comprobadas. “Si comenzara de nuevo me arriesgaría más con mis discos", comentó en la conferencia de prensa con los periodistas. El trabajo publicado el año pasado sucede a “Amor total”, álbum de relativa trascendencia en su carrera. A pesar de esa poco exitosa experiencia y de haber permanecido tres años al margen del mercado discográfico, Emmanuel todavía acapara la atención de sus fans y la prensa. Pocas arrugas, ausencia de canas y su mirada oculta tras unos oscuros anteojos de sol, la consagrada voz -en sus distintas conversaciones- no deja tocar los temas sociales. Definitivamente le interesan más los problemas del tercer mundo que los de la farándula. Esta asumida preocupación lo llevó a incluir en la nueva placa la composición "Me tira el alma al suelo", uno de los principales cortes de la grabación que ahonda en la temática de la extrema pobreza. "Estuve compartiendo con la gente que en México vive debajo de las alcantarillas y esa triste vivencia la conversé con un compositor peruano. Fue así como se gestó la canción".
La participación que el ídolo tendrá como miembro del jurado no es algo nuevo. En 1981, el mismo año en que se presentó The Pólice, también estuvo en el certamen viñamarino formando parte de la mesa calificadora. En esa ocasión, sin cumplir todavía los 20 años, se presentó con un show de no más de tres canciones que daba cuenta de su potencial como cantante y compositor. Respecto a la función de juez, enfatiza que él evaluará tanto a la canción como a quien la defienda.
Su última actuación registrada en el escenario de Viña la realizó en 1994 y desde entonces no ha vuelto a pisar la Quinta Vergara. El artista adelantó que el show se basara principalmente en los éxitos del recuerdo.


El Metropolitano, 17 de febrero de 2000