Y al fin llegó el gran día, por fin se cumplió el sueño y el anhelo que por muchos años el público chileno esperó: “Emmanuel en concierto en Santiago”. Desde tempranas horas de la tarde del martes 20, numerosos fans de un variado espectro de edades comenzaron a llegar al Arena Santiago y conforme las horas fueron pasando el entusiasmo y expectativa por el comienzo del show fue creciendo con vítores que coreaban el nombre de Emmanuel.
9:25 de la noche, ante un Arena Santiago lleno, las luces encendieron el imponente escenario proyectando efectos visuales en la gran pantalla colocada al fondo del mismo en medio de dos largas y enormes bandas o franjas de luces pixeladas e iluminaron el arribo de los músicos y los primeros acordes que estimularon a un público enfervorizado.
Emmanuel salió a escena ingresando por una tarima que daba al centro del escenario con “No he podido verte” y un Arena que se vino abajo con muchos gritos femeninos que se expresaron desde el principio hasta el fin del concierto, también fue posible observar entre el público asistente a más de algún hombre emulando los inconfundibles pasos y movimientos de Emmanuel. Ese primer tema fue una simbólica y emotiva inauguración del primer concierto en Santiago.
A lo largo de todo el concierto, la imagen de Emmanuel – en close up -fue proyectada constantemente en las dos pantallas gigantes ubicadas en cada lado del escenario. Luego de un intenso y rítmico inicio, Emmanuel sorprendió al público chileno con un sereno y reflexivo mensaje de apoyo a la próxima Teletón (30 de noviembre - 1 de diciembre), acto seguido entregó una emotiva interpretación de “Que será”, uno de sus más bellos temas existenciales – del disco Entre Lunas (1988). Ese mágico momento provocado por el artista fue correspondido con un silencio absoluto por parte del público, en señal de inequívoca atención al mensaje de la canción.
He aquí el mensaje de Emmanuel: “Se les acerca el Teletón, es el Teletón más antiguo de Latinoamérica – yo creo que del mundo –. Se deben de sentir orgullosos. Gracias a este Teletón hay uno en México, uno en Honduras, hay uno en Guatemala (aplausos). Gracias a ustedes se ayuda a muchísimos niños. Yo he estado en uno de estos hospitales, estuve en dos aquí en Santiago, en México en algunos, en Centroamérica en algunos. Y estar con esos niños nos hace pensar por qué yo si puedo caminar y ellos no, porque yo tengo mis manos aquí y ellos no las tienen. Por qué hay tantos padres que sufren con las desgracias de sus hijos y me vuelvo a mirar y digo yo camino, yo canto, platico, veo como ustedes ven, con esos ojos. Podemos abrazar, podemos decirle a la persona que queremos con un solo abrazo tantas cosas y estos niños no lo pueden hacer, se les puede abrazar.
Por qué hay tantos seres humanos que andan en sillas de ruedas y no pueden ver y no pueden hablar. Y hay algunos que no tienen sillas de ruedas y pueden caminar y ver y andar, pero no saben amar, no saben sacar un pedacito de aquí (del corazón) (aplausos).
Cuando iba al colegio, pasaba por las esquinas y de pronto veía gente pobre. Yo recuerdo que esa gente pobre me llamaba la atención y me quedaba viéndolos y no alcanzaba a imaginar cual era el dolor que ellos tenían. Empecé a hablar con Dios desde pequeño, empecé a disentir con él, era muy pequeño. Hoy ya no soy tampoco y sigo discutiendo con él. Me despierto muchos veces y le digo que pasó?, por qué yo sí, por qué ellos no, por qué ustedes sí, por qué tantos no, me peleo y me vuelvo a pelear cada noche, antes de dormirme, antes de cerrar los ojos, sigo hablando con él y me entrego a él, ¿Qué será?”
El inicio del primer medley con “Seguía lloviendo afuera”, se tradujo en una sorpresa en los rostros del público más culto de las canciones de Emmanuel, pues éste es uno de los temas – aparte de sus hits más famosos – que gusta a muchas y muchos. Lo mismo pasó con “El rey azul”. Una particularidad que caracteriza a la música de Emmanuel es la diversidad de temas de su discografía que - sin haber ocupado necesariamente posiciones en los rankings – han sido tocados en la radio y el público los ha distinguido y hecho sus favoritos de igual forma. Así, por ejemplo, era posible escuchar entre el público comentarios como ¿irá a cantar “Maldito miedo”? y así quizás cuantos otros asistentes al show hayan tenido en mente esas otras canciones de Emmanuel, las que ciertamente de haber sido incluidas en el espectáculo hubiesen implicado un concierto no de dos horas, sino una maratón de conciertos de varios días.
Luego se vino “Ay que arrimar el alma”, cuya melodía invitaba al público a acompañar a Emmanuel en su interpretación. Conforme transcurría el medley, la pantalla ubicada al fondo del escenario comenzó a proyectar videoclips de “Sólo” y “Pobre diablo”, tras lo cual el punto cúlmine fue la potente interpretación que Emmanuel hizo de “Detenedla ya”… que es una ladrona detenedla y un estruendo de bombas que emergieron del borde del escenario estremecieron
La energía liberada recorrió cada rincón del Arena, para luego recogerse en el inicio de “Sentirme vivo” y volvió a liberarse con la parte más rítmica desde el escenario hacia el público en un estallido que hizo a todos ponerse de pie y acompañar a Emmanuel. Pero la sorpresa fue doble cuando esa energía se transformó en sendas llamaradas de fuego que emergieron desde los bordes del escenario. Con esa dosis de energía, difícil que alguno de los asistentes no se haya sentido vivo.
La euforia ya estaba desatada y se vino una alegre introducción de rap que dio paso nuevamente al ritmo, esta vez de la mano del contagioso cha-cha-cha de “El bodeguero”. Emmanuel regresó al escenario en camisa y con un sombrero blanco en una lucida coreografía, acompañado de 6 bailarinas y la proyección de la silueta de la carátula del disco Emmanuel Presenta (2003) en las pantallas de bandas pixeladas.
Luego, las palabras de Emmanuel y el suave acompañamiento de sus músicos crearon un ambiente romántico de la mano de “Este terco corazón” con un novedoso arreglo estilo vals peruano. En un momento, Emmanuel sacó su teléfono celular e invitó al público a iluminar con sus teléfonos celulares, acto seguido, miles de celulares se encendieron como estrellas en el firmamento del Arena Santiago.
Emmanuel cambió de vestuario nuevamente, reapareciendo esta vez en camisa color rojo y elevando nuevamente la temperatura con un megamix de clásicos del pop español: “La chica de humo”, “Toda la vida” y “La última luna”. Salió volando por la ventana, era el hombre del mañana… Emmanuel se detuvo a reflexionar acerca la necesidad de que tomemos conciencia de la problemática ambiental que afecta a nuestra sociedad y le habló a los chilenos de la necesidad de proteger los prístinos ríos del sur (Región de Aysen) que hoy se ven amenazados por la construcción de varias centrales hidroeléctricas (para más información visita www.patagoniachilenasinrepresas.cl). “Para qué destruir esos ríos, - dijo Emmanuel – ustedes, los chilenos tienen un corazón grande y la capacidad de resolver esta situación”, agregando que hay otras formas de obtener energía sin que necesariamente se deba afectar el medio ambiente.
En el espectáculo de Emmanuel no podían faltar las obras cumbres del disco Intimamente (1980) cuyas canciones fueron seguidas con devoción, letra a letra por parte del público. Este medley comenzó “con olor a hierba” y terminó con “Tu y yo” del disco homónimo de (1982) y la despedida de Emmanuel del escenario.
Luego de unos minutos y ante un rendido público que pedía su retorno, un potente inicio estilo remix dieron paso a “Corazón de melao”. Emmanuel apareció nuevamente sobre el escenario acompañado por sus bailarinas y la fiesta nuevamente se desató. En los momentos previos a la despedida, miles de papeles de colores cayeron desde el cielo del escenario y una fan se acercó al borde del escenario y entregó a Emmanuel una flor color rojo que él cogió, tras lo cual se despidió de cada uno de sus músicos y el público anhelando volver el próximo año.
Emmanuel presentó un espectáculo que satisfizo las expectativas de la gente que lo fue a ver, con una potente voz y presencia sobre el escenario. Su show fue sólido, intenso, fluido, ágil, emotivo, reflexivo, romántico y rítmico, cuidadosamente acompañado por el escenario y las luces. Un viaje por su discografía, en un balance apropiado entre el ayer, el hoy e invitando también al mañana mediante un adelanto de la nueva versión de “Tengo mucho que aprender de ti” que formará parte de su nuevo disco “Retro”. Un show ecléctico que generó una atmósfera que sólo los grandes de la música logran y que permitió una mágica y recíproca comunicación entre el artista y su público.
Hemos escrito estas líneas para compartirlas con todos sus seguidores de Chile y Latinoamérica, evocando las miles de sensaciones y emociones que provoca su música, y que hicieron vibrar a las 8 mil personas que asistieron al Arena.
Muchas gracias Emmanuel.
emmanuelenchile.blogspot.com
2 comentarios:
Hola, hola, estimadas Mónica, Rocío y Angela, aquí dejamos el reporte y esperamos les agrade a todas y todos los que visiten el blog.
Cordiales saludos
Rodrigo que lindo reporte,gracias por recordarme tan soñado y bello momento que compartimos con nuestro idolo,me imagino como quedaste de cansadito pero valio la pena querido amigo estan buenisimas las fotitos y muy lindas tus palabras para mi querido rey azul,que lindo hablo¿verdad que si?y cuando canto .rey azul y con olor a hierba que son mis favoritas,casi quede sin voz para corearlas,gracia amigo eres lo maximo ,y espero verte en la teleton ,muchas gracias,y felicitaciones sinceramente
rociomb2005#@yahoo.es
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